Usando la Imaginación Creativa
De nuevo, imaginemos que cultivamos Metta hacia nosotros mismos (en el primer estadio de la práctica).
- Piensa en una situación que te haría muy feliz. A mí me gusta pensar que estoy practicando buceo libre en el Arrecife Australiano de la Gran Barrera. Es algo que nunca he hecho pero, cuando imagino esa sensación del cuerpo flotando, mientras las cálidas corrientes marinas acarician mi piel y la luz del sol se filtra entre las aguas, sobre los corales de bellas tonalidades y los bancos de peces multicolores que nadan alrededor de mí, me siento muy bien.
- Puedes pensar en algo que te daría un verdadero y profundo sentido de alegría y bienestar. Quizá te veas flotando en un gran globo aerostático sobre los Andes, o caminando en la luna, o simplemente acostado en la playa.
- Al igual que en el ejercicio de los recuerdos, procura incluir tus sentidos tanto como puedas. Haz que tu imaginación sensorial sea muy viva.